(126a) Seguridad De Procesos En El Upstream: operación Basada En Riesgo En Vaca Muerta

El presente trabajo se desarrolla en la Gerencia No Convencional, en el Upstream de la empresa YPF, donde comenzó el primer Desarrollo de un yacimiento de petróleo No Convencional en Argentina de la Formación Vaca Muerta en el Año 2011. El yacimiento se encuentra localizado en la provincia de Neuquén, en la zona centro-oeste de la república Argentina. Actualmente con más de 520 pozos productores de Shale Oil y 15 instalaciones de superficie, los desafíos de operación remota del campo han generado que se profundice en tópicos claves como es la operación por excepción, es decir, trabajar sobre los desvíos encontrados y no sobre las generalidades.

Desde los inicios del desarrollo del yacimiento se diseñaron sistemas de instrumentación y telemetría bajo conceptos de operación desatendida y toma de acciones en tiempo real minimizando la exposición frente a riesgos de las personas dentro de las instalaciones. El crecimiento exponencial de variables a monitorear y controlar vuelve clave el manejo por excepción a través de un sistema de alarmas unificado que incluya instalaciones de superficie y pozos productores. La falta de un sistema de gestión de alarmas consolidado nos llevó a una situación “Overloaded”, contabilizando en el año 2015 más de 20000 activaciones de alarmas por hora, haciendo completamente inviable la operación mediante el sistema de alarmas unificado.

Con foco en alcanzar la excelencia en la gestión de la producción y operación segura del yacimiento, se decidió implementar un Centro Integral de Control (CIC), siendo este el primero en su tipo en el Upstream de la empresa YPF. Su función, entre otras, es desplegar la operación basada en riesgos, alineado a los estándares internacionales de Seguridad de Procesos. Con el objetivo de disponer de un sistema de alarmas predictivo, se incorpora un Ingeniero de Procesos dedicado dentro del CIC trabajando en conjunto con un grupo interdisciplinario para la gestión de alarmas, compuesto por ingenieros de mantenimiento y especialistas en sistemas. Soportado por filosofías de alarmado basada en prácticas internacionales recomendadas, como la EEMUA 191, se desarrolla un fuerte trabajo de racionalización alcanzando un sistema de alarmas con una performance entre “Robust” y “Stable”, llegando a obtener en la actualidad menos de 10 activaciones de alarmas por hora.

El trabajo multidisciplinario permitió luego de una etapa de monitoreo y evaluación, la detección de alarmas repetitivas y malos actores, para luego de un análisis integral implementar un proceso de revisión y justificación de alarmas que cumplan con los criterios de una operación segura.

En el trabajo se describen y analizan los métodos para la racionalización de alarmas basado en riesgo, cómo se abordó este desarrollo con la operación y cuáles son los beneficios obtenidos, entre ellos, generando un cambio en la cultura de operación del yacimiento atendiendo las alarmas con acciones estandarizadas formalizadas en manuales de respuesta ante alarmas.