Estamos Listos Para Operar y Mantener Nuestros Sistemas Instrumentados De Seguridad?

La puesta en operación de nuestros Sistemas Instrumentados de Seguridad (SIS) lleva consigo una responsabilidad comparable con las de la paternidad, una vez que se tiene un hijo nunca se deja de ser padre, ese mismo tipo de compromiso se adquiere cuando somo los responsables por la operación y mantenimiento de un SIS.

Conocer las necesidades de atención que requiere cualquier capa de protección, entre ellos el SIS, es esencial para poder entender que se demanda de nosotros en el rol de operadores y mantenedores. La normativa específica que rige esta materia es la normativa ANSI/ISA-61511:2018 e IEC-61511:2016: “Functional Safety – Safety Instrumented Systems for the Process Industry Sector”, la cual es totalmente compatible con los sistemas de gestión de riesgo de proceso en cualquiera de sus enfoques (OSHA-PSM o CCPS-RBPS) y busca por medio de apenas 13 requisitos (bastante menos que para el resto de las tareas, a decir verdad) que se asegure que: a) que el desempeño, en términos de Nivel de Integridad de Seguridad (SIL), de cada Función Instrumentada de Seguridad (SIF) perteneciente al SIS se mantiene durante la operación y el mantenimiento y b) se mantiene la integridad requerida del SIS, como un todo, durante su operación y bajo las actividades de mantenimiento.

Conseguir esos objetivos es todo un desafío, principalmente porque los elementos que van en contra son aspectos actitudinales de quienes hacemos los trabajos relacionados con el SIS en forma diaria, el nivel de conciencia y de competencias que exige estas tareas es especialmente alto.

Coloquemos esto en perspectiva, el ciclo de vida del SIS lo podemos dividir en tres etapas, una de Análisis que normalmente podría durar unas 20 semanas y que busca responder la interrogante de ¿cuánta seguridad necesitamos?, una etapa de Diseño y Construcción que puede extenderse unos 20 meses y que busca resolver el ¿cómo obtenemos la seguridad que necesitamos?, y finalmente viene una etapa de Operación y Mantenimiento que puede durar hasta 20 años, para implementar la estrategia de ¿cómo mantenemos la seguridad que necesitamos?. Es hasta entonces entendemos que operar y mantener el SIS es un ejercicio diario y que debemos practicar con la sapiencia necesaria para poder alcanzar el objetivo de preservar la integridad del SIS.

Durante la Operación y Mantenimiento, uno de los principales factores que atenta contra la integridad y la función del SIS es la interacción diaria del humano (operado o mantenedor) con el SIS, por lo que es de suma importancia que el personal involucrado tenga las competencias necesarias para reconocer las situaciones que impactan al SIS.

Podemos generar las siguientes preguntas en forma de un pequeño autodiagnóstico para aclarar este punto:

• El operador:
  • ¿Reconoce los peligros para los cuales esta implementada cada SIF? Y como este le protege,
  • ¿Está en conciencia del impacto de la colocación de una SIF en bypass? y como esto le desprotege,
  • ¿Conoce el procedimiento que debe implementar al reconocer que el SIS ha fallado? y reconoce cuales son las medidas compensatorias para mantener el nivel de riesgo requerido?
• El mantenedor:
  • ¿Reconoce como su trabajo impacta la seguridad de la instalación, de él y sus compañeros?,
  • ¿Está en conciencia del impacto del no cumplimiento de las frecuencias de mantenimiento o de la precisión de una calibración sobre la seguridad?,
  • ¿Conoce el procedimiento que debe implementar cuando requiere hacer una modificación y el impacto de esta?

Mas allá del compromiso gerencial en la consecución de las metas de reducción de riesgo o el cumplimiento de indicadores de desempeño del SIS, queremos hacer énfasis en la responsabilidad personalísima de cada uno de los involucrados en las tareas relacionadas al SIS y lo fundamental de la generación de competencias necesarias para poder llevarlas a cabo en la mejor forma posible.

Con más de 20 años del inicio de las normativas basadas en desempeño para el diseño, instalación, operación y mantenimiento de los Sistemas Instrumentados de Seguridad (SIS), surge la pregunta, ¿Estamos listos para operar y mantener nuestros Sistemas Instrumentados de Seguridad?

Nuestra posición como consultores nos da la oportunidad de ver muchas y diferentes instalaciones, lo que nos permite tener una buena idea de cómo se está llevando a cabo el proceso de adopción general de las normas relativas a los Sistemas Instrumentados de Seguridad para el sector de la industria de procesos. Así, por ejemplo, se observa que durante estos años se ha avanzado y se han consolidado aspectos como; reconocer la necesidad de realizar estudios para la determinación del Nivel de Integridad de Seguridad (SIL), pero no se muestra el mismo nivel de avance en temas relacionados con la cultura de mantenimiento de la Seguridad Funcional a lo largo de la vida útil de los Sistemas Instrumentados de Seguridad.

El proceso de operar y mantener dentro de la Gestión de la Seguridad Funcional crea retos y la necesidad de generar nuevas formas de pensamiento, que deben reflejarse tanto en el desarrollo de un proyecto como en las formas de trabajo de cada organización.

Este trabajo presenta un diagnóstico de las prácticas observadas por CSF como consultora en el área de la Seguridad Funcional, respecto a la interacción de las personas que tienen responsabilidades sobre tareas relacionadas a los SIS y al cumplimiento de las cláusulas de la normativa internacional ANSI/ISA-61511:2018 e IEC-61511:2016 para generar un set de lecciones aprendidas que sirvan como guías para la mejora continua de todos los procesos relacionados con la seguridad.